La evolución final o gran cambio.
El gran reto al que nos enfrentamos en los vehículos es al aumento de masa/peso y velocidad. Desde los años 60 los vehículos no han parado de crecer en tamaño, peso y prestaciones.
La energía cinética que consume cualquier vehículo que circula por una carretera plana y horizontal es siempre la misma (1/2 mv²); por tanto, el consumo de energía depende de su masa y de su velocidad al cuadrado. Los retos son claros menos masa y menos velocidad. La primera ha sido un fracaso hasta ahora. La segunda también, ningún gobierno quiere limitar la velocidad de los vehículos, actualmente esta segunda opción sería muy sencilla con la tecnología actual. Es decir mucho movimiento en anuncios de hibridación y electrificación pero nunca se abordan estos dos grandes problemas de fondo: masa y velocidad, y los gobiernos callados. La velocidad empeora el rendimiento por un segundo factor que no hemos comentado y que es muy sencillo de entender. La fuerza de fricción con el aire aumenta con el cuadrado de la velocidad y varía con la eficiencia aerodinámica y, por tanto, el consumo del vehículo. Lógicamente los vehículos SUV son los peores a nivel aerodinámico por cuanto tienen una área frontal mayor; por tanto, estos presentan una fuerza de fricción con el aire aun mayor.
Actualmente, aún vemos anuncios de vehículos SUV de una popular marca, en los que la hibridación, en lugar de ser una alegría por cuanto reducimos emisiones y consumo. Pues, no! el reclamo consiste en ofrecer mayor deportividad por cuanto la hibridación suma ambas potencias: la térmica con la eléctrica. Pues, Felicidades por tal logro, seguro que esta es la mejor propaganda a nivel ecológico, no os parece!
Para acabar, Vamos a hacer nuestra propia carta a los reyes sobre la contaminación máxima aceptable para el año 2040.
1.- Vehículos limitados a 1000 kg de masa como máximo.
2.- Máxima emisión de CO2 90 gr por km, sumado el propio vehículo, más la producida en las centrales en los vehículos híbridos enchufables y medidos con una norma fiable. No enredemos a la gente reduciendo la propia del vehículo para hacer crecer la de la central eléctrica productora.
Todo lo demás ya quedará implícito en estos dos principios anteriores. Y es que en realidad no puede existir un vehículo rápido y pesado con este consumo de CO2 que se propone. Incluso pienso que con voluntad nos podríamos acercar a los 800 kg de masa por vehículo como máximo. Con esto creo que es posible una aceptable sostenibilidad de los vehículos.
No me parece lógico que vehículos eléctricos muy pesados, pues son vehículos normales a los que se le añaden de 300 a 500 kg de baterías vayan a ser muy ecológicos.
Pero como se trata de una carta a los Reyes para evitar el cambio climático, vamos a animarnos a ver si nos escuchan nuestros dirigentes:
Queremos barcos movidos por centrales de ciclo combinado o hidrógeno.
Queremos la desaparición del avión para trayectos cortos y que nuestro gran amigo el tren nos ayude a unirnos a todos en buenas condiciones.
Y, finalmente el éxtasis, traer la producción lo más cerca posible del consumo para reducir el gran peso en mercancías que se transportan actualmente, no vaya a ser que deslocalicemos más la producción con las propuestas que hacemos. No solo se ha de mover el ciudadano hacia la sostenibilidad, Europa tiene un papel muy importante y tiene que trabajar mucho en ofrecer una movilidad sostenible y de calidad en su territorio y también debe evitar esta gran lacra de la deslocalización de la producción no se si con aranceles o por otras motivaciones legales, no se entiende que estemos consumiendo productos muy normales y sencillos que se fabrican en China o donde sea.
Está claro que la actual propuesta de vehículos eléctricos enormemente pesados y con velocidades elevadas no solucionará absolutamente nada.
3.- Finalmente, pensamos que una solución en el futuro inmediato puede pasar por el gas natural primero y por hidrógeno después como combustibles y el oxigeno como comburente. El gas natural es un excelente y sostenible combustible pues tiene un elevado porcentaje de hidrógeno en su composición molecular, y con respecto al hidrógeno está muy bien pero lo vemos aun muy poco elaborado y no creemos que sea posible utilizarlo en los próximos años. Por otro lado creemos que los vehículos grandes como camiones, con consumos exagerados y con necesidad de recorrer grandes distancias al día, no es posible que puedan ir con baterías. Por descontado seguro que se van a investigar y encontrar otras formas de energía intermediaría que podrán ser utilizadas para ayudar a la movilidad, pues esta consciencia de descarburación no ha hecho más que empezar.
No puede entenderse ni aceptarse la electrificación con la actual subida de precios de la electricidad y, que, por supuesto, nunca más volverán a bajar.
Por otro lado es imprescindible un estudio serio y en profundidad para definir como debemos entender lo que es una sociedad moderna y sostenible, pues no parece lógico que este basada en el continuo crecimiento y un consumo exagerado de las materias primas, un transporte exagerado de mercancías con la actual deslocalización como hasta ahora, pues este modelo social conlleva que siempre haya consumo de energía y materias primeras creciente y continuado. Hemos de buscar modelos sociales más razonables y sostenibles basados en escuchar más las propuestas nuestros sabios y menos a las del dinero. Entendemos que el modelo social basado solo en el dinero no es capaz de solucionar el mayor problema al que se enfrenta nuestra sociedad con el cambio climático, es necesario compaginar el modelo de crecimiento con el de sostenibilidad, hecho al cual nadie, de momento, ha sido capaz de dar respuesta, aunque seguro que todos habréis oído mucho el uso de este termino pero de momento poca cosa más.
Con ello no debe entenderse nunca un despreció de la "mejor Tecnología" pues esta es la única que nos puede hacer evolucionar como sociedad y sacarnos del atolladero actual, en el que, sin duda, nos ha puesto una sociedad basada única y exclusivamente en el dinero y la rentabilidad. Este modelo ya no es posible pues todos los procesos industriales han de tener previsto el coste climático para que sean aceptables.
Finalmente, desde que acabe mi carrera en Ingeniería, allá por los años 1976, he oído hablar de que la fusión nuclear solucionaría todos nuestros problemas energéticos, 45 años después aun estamos en los inicios de poder controlar un plasma y aún se anuncian 20 años más antes de poder utilizarla.